
Se trata de un breve cuento para recordar el algoritmo de la suma con llevadas. Se lo escuché a Irene, una compañera en prácticas, y me animé a hacer el dibujo. Más o menos la historia es algo así:
"Érase una vez una casa muy grande donde vivían los números. Cada uno tenía su propia habitación y la casa era tan grande que incluso había alguna habitación libre en el desván por si llegaba alguna visita. A los números les encantaba sumar y cada vez que lo hacían, montaban un banquete para celebrarlo. Cada inquilino bajaba a su propia mesa, así los de las unidades se reunirán en su mesa, los de las decenas en la suya y los de las centenas igualmente. En cada mesa sólo podía caber un número, por lo que cuando las unidades sumaban más de 9 les pedían a sus vecinos las decenas que alojasen al 1 en el desván. Entonces el uno del desván bajaba a comer junto con las decenas y lo mismo ocurría si se juntaban mas de 9 decenas o centenas para comer. Al final siempre había sitio para todos los números."
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